El cuidado de una mascota puede implicar su paso por quirófano. Aunque las intervenciones quirúrgicas no son algo habitual cuando se realizan controles de salud periódicos, en ocasiones resultan inevitables.
Las operaciones para mascotas conllevan una serie de pruebas diagnósticas, medicación y otros servicios que elevan aún más el coste de la intervención quirúrgica. Disponer de un seguro para mascotas es una forma más económica de acceder a ciertas coberturas esenciales para garantizar el buen estado de salud de tus animales.
Operaciones para mascotas con los costes más elevados
El tipo de operación y la clínica en la que se realice serán dos aspectos decisivos a la hora de determinar el coste de la intervención quirúrgica a una mascota. Las intervenciones de esterilización son de las más económicas (en torno a los 100 euros), pero otras pueden superar los 2.000 euros (p. ej., la colocación de una prótesis de cadera para perros).
A estos precios hay que sumar otros costes adicionales como las consultas del veterinario por especialidad (55 euros aprox.), los estudios diagnósticos (en torno a los 70 euros por una ecocardiografía y hasta 300 por una endoscopia), los días de hospitalización (40 euros/día aprox.) y los servicios de laboratorio (desde los 15 euros de una citología hasta los 70 de una transfusión de sangre).
Teniendo en cuenta todos estos gastos, las operaciones para mascotas más costosas son:
- Operaciones de la vista (cataratas, tumores, distiquiasis…)
- Cirugía del aparato urinario y digestivo (uretrostomías, hernias, enterectomías…)
- Cirugía torácica (lobectomías, esternotomías, torsiones pulmonares…)
- Cirugía traumatológica (prótesis, fracturas, artroplastias…)
¿Cómo garantizar la buena salud de tu mascota?
No siempre es posible evitar que tu mascota pase por quirófano, pero sí existen maneras de anticipar esa posibilidad y prevenirla. Aparte de las revisiones de salud periódicas, se pueden adoptar otras medidas de precaución para evitar situaciones de riesgo que deriven en la necesidad de una intervención quirúrgica.
- Supervisar sus juegos dentro y fuera de casa.
- Instalar barreras en balcones, ventanas y puertas para evitar que los animales entren en zonas peligrosas, se caigan desde una gran altura o se escapen de casa.
- Mantener a las mascotas alejadas de otros animales desconocidos para evitar peleas o contagio de enfermedades.
- Utilizar arneses y correas para tener a las mascotas siempre bajo control durante los paseos.
- Guardar los productos de limpieza y otras sustancias potencialmente tóxicas fuera del alcance de las mascotas.
- Esconder los cables eléctricos de casa para evitar que las mascotas los muerdan.