El casco es uno de los principales elementos de seguridad para quienes viajan en moto. Protege la cabeza de forma eficaz y reduce hasta en un 50 % las posibilidades de sufrir lesiones mortales.
El uso del casco durante la conducción de una moto es el modo más eficiente de no sufrir lesiones en la cabeza en caso de accidente. Pero no todos los cascos para moto son iguales ni ofrecen las mismas prestaciones. Utilizar un modelo adaptado a las necesidades de cada conductor aumentará su nivel de protección y eficiencia.
Tipos de casco de moto según el tipo de conducción
Al igual que hay seguros de moto básicos y seguros de moto con coberturas ampliadas, también hay diferentes modelos de casco con prestaciones más o menos avanzadas. Aunque todos los cascos homologados ofrecen protección en caso de accidente, la experiencia de conducción puede ser muy diferente dependiendo del modelo elegido.
Estos son los 4 tipos de casco de moto más habituales y sus usos:
- Casco integral: cubre toda la cabeza y está cerrado por completo. Es el más seguro, de hecho, es el tipo de casco que emplean los pilotos profesionales y el más recomendable para los desplazamientos largos. Sin embargo, puede resultar un poco incómodo.
- Casco jet: es un casco más estético, ligero y cómodo, pero menos seguro. Como no cubre toda la cabeza ni la cara, no ofrece tanta protección en caso de caída. Viene bien como opción para el verano y los días de mucho calor.
- Casco abatible: es un modelo versátil que ofrece un buen nivel de protección en la cabeza y en la cara. Se parece bastante a los cascos integrales, con la particularidad de que incorpora una visera abatible que se puede abrir para llevar el casco como un modelo jet. Es una de las opciones más extendidas porque funciona tanto para desplazamientos urbanos como para viajes por carretera.
- Casco off-road: son modelos de diseño aventurero, utilizados habitualmente para la práctica de motocross, aunque igualmente aptos para la circulación sobre cualquier tipo de terreno. Ofrecen una buena cobertura de la cabeza y el mentón, pero no suelen llevar visera, por lo que es necesario usar gafas.
Aparte de estas características de diseño, los cascos de moto pueden incluir otras particularidades como sistema antivaho en la visera o forros interiores extraíbles. Esto último facilita la limpieza y el mantenimiento del casco para que dure más tiempo.