Las visitas al taller son más frecuentes de lo que desearíamos, pero necesarias para mantener tu coche a punto. ¿Sabes cuáles son los elementos que más se cambian?
La batería es la pieza que más veces se sustituye. Se suele estimar que su vida útil es de entre cinco y siete años cuando sale de fábrica. Pero hay ocasiones en las que esta regla no siempre se cumple y puedes encontrarte con este problema mucho antes (el crudo invierno es una buena razón) Es importante destacar que tomes medidas al menor síntoma, como que al vehículo le cueste arrancar.
Los neumáticos son el único punto de contacto del coche con el asfalto, por lo que son imprescindibles para garantizar la seguridad. Su duración depende de diferentes factores, por lo que el cuidado y mantenimiento que se les dé será esencial.
La OCU ha constatado que el fallo de las luces delanteras es un problema habitual, aunque los nuevos sistemas, como por ejemplo los faros de xenón, han aumentado la vida útil de este importante componente para ver y ser visto.
A más componentes en el vehículo, mayores elementos que se desgastan. Con la incorporación de la tecnología a las llaves del coche, se han incrementado los problemas relacionados con esta, aunque suelen tener fácil solución y bajo coste, generalmente un simple cambio de la pila.
Por último, el elevado uso que hacemos de las puertas de los vehículos puede dar lugar a problemas muy variados. Es muy común un tirador que se atasca o una cerradura que no responde y por tanto no abre la puerta.
Para todos estos problemas tienes talleres profesionales que los solucionarán. Pero si hablamos de cosas más graves como un siniestro total, la cosa cambia. Para evitar disgustos te recomendamos un seguro que cubra estas contingencias. Si contratas tu seguro con Pelayo, y el siniestro se produce dentro de los dos primeros años de matriculación, abonaremos el 110% del valor de nuevo del vehículo si el asegurado es el primer propietario. Transcurridos dos años, se abonará el 110% del valor de tasación GANVAM del vehículo.